1 de Mayo: A un año del paro nacional, Entre las calles y las urnas

El año pasado conmemoramos el Primero de Mayo iniciando el paro nacional, las masas salieron a las calles desafiando al Gobierno y a las direcciones burocráticas que convocaron un concierto virtual, por eso ese es un día que queda en la memoria. Este año lo hacemos en medio de las elecciones para presidente. Dos escenarios diferentes de la lucha de clases. El primero es el terreno de los trabajadores y los oprimidos, el segundo el de los capitalistas.

Para la clase trabajadora del mundo el Primero de Mayo es el día internacional de los trabajadores, una fecha de lucha de los explotados y desposeídos contra los capitalistas y su sistema de explotación. Pero los capitalistas dicen que es el día del trabajo, para negar la división de la sociedad en clases sociales y la lucha de clases.

Lo concreto es que las masas colombianas entraron en el torbellino de la lucha de clases masiva con el paro de noviembre de 2019, las movilizaciones de septiembre de 2020 y el paro nacional de 45 días de 2021.

Con la lucha en las calles logramos triunfos nada despreciables como el retiro de la reforma tributaria, la de la salud, y la caída del odiado ministro Carrasquilla. Aunque el triunfo más grande fue la confianza de las masas de que en las calles es donde se logran victorias.

En esta lucha de clases, tras la feroz represión y la conspiración de la alta dirigencia sindical y de varios políticos de izquierda, el paro se desmontó para desviar la lucha de las calles a las urnas. Pero salga elegido quien sea, gobierne quien gobierne, debemos continuar la lucha callejera. Si gana Federico Gutiérrez con mayor razón porque será el continuismo. Si es Petro el presidente, y nos movilizamos, va tener dos presiones: la de los ricos con sus leyes y contrarreformas y la de las masas con la lucha en las calles. La presión más fuerte impondrá un programa. Si los capitalistas ejercen más presión continuará el régimen asesino actual y a los expropiadores nos seguirán expropiando. Si nuestra movilización es más fuerte, podremos derrotar el régimen y a la derecha. Pero para lograr cambios realmente profundos, necesitaremos también superar al gobierno reformista de Petro, expropiando a los expropiadores, y con movilización revolucionaria podremos conquistar un verdadero gobierno de los trabajadores.

Por eso no será suficiente con ir a las urnas,  donde el PST propone voto crítico por Petro. lo más importante será  continuar la lucha en las calles para que la crisis la paguen los ricos y para conquistar un nuevo sistema social, el verdadero socialismo que significa una sociedad sin burócratas ni privilegiados, sin el robo por parte de los capitalistas del trabajo ajeno, sino con equidad, socializando la riqueza, protegiendo el medio ambiente y conquistando la libertad que nos da el hecho de tener resueltas las necesidades materiales y espirituales de toda la humanidad.

En Ucrania y en el mundo la clase obrera es una sola

El gobierno de Putin ha invadido Ucrania para defender los intereses de la burguesía que representa. Por su parte la OTAN quiere el control de ese país y de Europa del Este para defender los intereses de la burguesía imperialista que está representada en esa organización militar. En medio de esa disputa quienes pagan son los trabajadores, principalmente de Ucrania, aunque también de Rusia. Los primeros porque son masacrados y los segundos porque sufren las consecuencias de las sanciones económicas del imperialismo, además de ser reprimidos si protestan contra la ocupación y el asesinato de sus hermanos de clase.

Los trabajadores ucranianos y los trabajadores rusos, pertenecen a la misma clase obrera del mundo, así como los capitalistas de Estados Unidos, China, Rusia y demás países pertenecen a la misma clase de los explotadores. A partir de esta ubicación es que debemos fijar una posición política y un comportamiento concreto frente a esa invasión.

Los trabajadores ucranianos están participando en la resistencia militar colocando sus sindicatos al servicio de esta causa, la de la autodeterminación del pueblo ucraniano, cuestión central de este conflicto. Ellos necesitan la solidaridad de sus hermanos de los demás países. Desde la Liga Internacional de Trabajadores y su sección colombiana, el Partido Socialista de los Trabajadores, estamos coordinando esa solidaridad con nuestros hermanos del Sindicato de los Mineros y Metalúrgicos Independientes de Krivoy-Rog.