#CongresoJuventudCUT Nos dijeron que no era la lucha, pero no hubo cambio

Por: Juventud PST, al Congreso de la Juventud de la CUT

Hace tres años, en el paro nacional, muchos jóvenes estuvimos participando en las calles con la esperanza de modificar las cosas para que quienes no teníamos empleo lo consiguiéramos y quienes trabajaban en exceso, sus jornadas fueran reducidas. Nuestra esperanza se sustentaba en la fuerza que teníamos y en lo que habíamos logrado: derribar dos ministros, una contrarreforma tributaria de Carrasquilla y una contrarreforma a la salud, además de desterrar a los empresarios de la copa América de futbol de nuestro territorio.

Pero en ese momento Petro, la dirección del paro y la mayoría de los partidos de izquierda nos dijeron que dejáramos la calle y canalizáramos toda nuestra energía hacia las elecciones para conquistar un “gobierno del cambio”. La mayoría terminó convencida de eso. Petro fuer elegido y vamos a completar dos años sin que en el congreso se apruebe una sola de las reformas concertadas presentadas por el gobierno, que por esa misma razón tienen más de contrarreformas que de reformas. El nivel de conquistas que logramos en menos de dos meses en las calles, no ha sido posible en dos años en el congreso ni con un nuevo gobierno. Es fácil concluir que lo que nos dijeron no resultó, y que lo que no conquistemos en la calle no lo lograremos con ese corrupto congreso ni con el llamado gobierno del cambio.

La mayoría de jóvenes de la clase trabajadora seguimos sin empleo y los pocos que han ingresado a trabajar laboran jornadas largas de hasta 12 horas diarias. Ese desequilibrio irracional continúa. El cambio “progresista” prometido no ha sido más que algo simbólico, una expresión de un cambio cuya diferencia realmente no se ha sentido ni se ha reflejado en términos de calidad de vida, de derechos nuevamente otorgados a los trabajadores, de un comportamiento distinto en los aparatos de represión social –excepto el nombre del Esmad–, de estabilidad laboral, de reducción de la pobreza, etc.

El sueño de vivir bajo un gobierno “democrático” que despertó expectativas de las masas no fue más que un anhelo cuya satisfacción no se ha cumplido. Ello implica un nuevo llamado a no bajar la guardia y retomar la lucha. Si los organismos imperialistas han manifestado estar de acuerdo con el plan del gobierno de Petro, significa que se aplicarán los planes del imperialismo y todo seguirá igual, en lo fundamental.

La juventud es víctima de las más sofisticadas formas de barbarie y agresión capitalista. Los peores salarios, la tasa de desempleo más alta y la nula experiencia de tener derechos laborales, todo esto recae en los jóvenes. De acuerdo con el Dane: “La tasa de ocupación (TO) para el total de personas entre 15 y 28 años fue 46,0%, similar a la registrada en el trimestre octubre – diciembre de 2022 (46,0%). La tasa de desocupación de la población joven se ubicó en 16,5%”. Por ello, somos los jóvenes quienes hemos protagonizado las más heroicas luchas políticas en la historia más reciente del país.

El congreso de la CUT debe llamar a retomar las calles y a la movilización independiente del gobierno. Debemos ir por nuevas exigencias:

Pleno empleo para todos los jóvenes. De nada sirve el estudio y tener una profesión y un título mientras no podamos ubicarnos laboralmente para subsistir. Que el trabajo se reparte reduciendo la jornada laboral.

Eliminación de la intermediación laboral con contrato directo y a término indefinido, con todas las garantías relacionadas con primas, vacaciones, servicios de salud y seguridad social.

Aumento del salario equivalente al costo de vida, es decir al costo de la canasta básica.

Subsidio y licencia de maternidad y menstruación para las jóvenes trabajadoras.

Erradicación del trabajo infantil que, aunque la ley no lo permite, aún existe en algunos sectores.

Pleno salario para jóvenes practicantes de las universidades y Sena a quienes se les paga solo el 75% bajo la excusa de que es su “primer empleo”, incrementando con ello la superexplotación y extracción descarada y agresiva de plusvalía.

Fuero sindical automático para todos los que se afilien a un sindicato.

Reformas estatutarias para mayor participación de la juventud trabajadora en las direcciones sindicales ocupando los cargos que hoy tiene pensionados y dirigentes eternizados en los puestos que no tienen estructuración laboral concreta

Plan de formación política y sindical anticapitalista, así como capacitación jurídica por parte de la CUT para la clase trabajadora juvenil.

Que todos los sindicatos de la central incluyan en sus pliegos de lucha las demandas y reivindicaciones de los jóvenes.