¿Afectará la caída del derecho al aborto en Estados Unidos a Colombia?

La respuesta es jurídicamente no, pero políticamente sí. Veamos de qué estamos hablando.

El 21 de febrero de 2022, la Corte Constitucional colombiana, mediante la sentencia C055 o sentencia “Causa Justa”,  eliminó el delito de aborto en Colombia hasta las 24 semanas de gestación (es decir que este puede ser realizado a voluntad de la mujer hasta esa edad gestacional), manteniendo por encima de estas semanas las tres causales vigentes desde la sentencia C355 de 2006; este fallo histórico producto de la lucha del movimiento de mujeres y del movimiento Causa Justa –pero también producto de dos años de intensas luchas sociales materializadas en los paros de 2019 y 2021– es histórico y convirtió el marco legal colombiano en uno de los más avanzados del mundo. Hasta ahora su implementación apenas inicia en medio de infinidad de barreras y obstáculos.

Este 24 de junio la Corte Constitucional de los Estados Unidos anuló el fallo Roe vs Wade, que es como se conoce el fallo con el que hace más de 50 años el aborto se convirtió en un derecho en dicho país. Es un retroceso histórico en derechos de las mujeres en el corazón del imperialismo, y un duro golpe en especial para las más pobres, las migrantes, las negras y las más jóvenes. Permitiría que en al menos 25 Estados se prohíba el aborto totalmente, obligando a las mujeres que en ellos habitan a recorrer largas distancias de hasta 12 horas hasta la clínica más cercana. Las movilizaciones en rechazo a esta determinación no se han hecho esperar y se anuncia que se viene un proceso de luchas para reconquistar este derecho.  La decisión de la Corte va incluso en contra del discurso oficial del presidente demócrata Joe Biden, y se considera parte del legado de Trump bajo cuyo mandato se nombraron tres de los magistrados actuales.

A pocas horas de conocerse el fallo que anulaba la sentencia Roe vs Wade, el ministerio de Justicia de Duque en Colombia, enviaba una comunicación a la Corte Constitucional colombiana, solicitándole que anule la C055 de 2022. Este comunicado sin efectos jurídicos reales, tiene sí efectos políticos muy importantes poniendo en entredicho ante la opinión pública la existencia del derecho, intentando mostrar que no se trata de una decisión “en firme”; en una clara violación a la independencia de poderes del Estado burgués. Hasta ahora la Corte Constitucional estudia varios recursos de nulidad presentados por diferentes sectores anti derechos. Según voceras de Causa Justa ninguno cuenta con fundamentos jurídicos suficientes para realmente proceder con la anulación de la sentencia, igualmente en Colombia las nulidades de sentencias constitucionales son excepcionales, por no decir exóticas.

La velocidad con que el Ministerio de Justicia emite su comunicado luego del fallo en Estados Unidos, hace ver que ambos hechos están relacionados, y que los sectores más reaccionarios de la burguesía mundial siempre coinciden y se apoyan cuando de eliminar derechos se trata.

Si bien es cierto que jurídicamente no existen argumentos sólidos para la nulidad de la sentencia, lo que nos demuestra la caída del derecho de aborto en Estados Unidos es justamente que las decisiones judiciales y de las cortes no dependen de la razón, la ciencia, el sentido común y menos de la justicia, sino de la correlación de fuerzas a nivel político, y que no son “eternas”. Nadie esperaba que una decisión de una Corte hace casi 50 años, un derecho adquirido y que se consideraba seguro, pudiera ser revertido. Este es un duro golpe y un duro mensaje: mientras que los explotadores y opresores tengan el poder en el mundo todos nuestros derechos están en riesgo y todas las conquistas pueden retroceder. Pero este no es un mensaje catastrofista ni lleno de desesperanza, todo lo contrario, la lucha apenas empieza y así como el fallo Roe vs Wade demostró no ser eterno ni inmutable, el fallo que lo anula tampoco lo es y dependerá de la lucha de las mujeres y la clase trabajadora en Estados Unidos que lo puedan revertir.

En febrero cuando obtuvimos nuestra victoria manifestamos: “esta victoria hay que protegerla manteniendo la lucha en las calles. Igualmente, nos queda el gran reto de exigir su implementación y la eliminación de las barreras en medio de un sistema de salud privatizado y desfinanciado; por lo que la lucha tendrá que continuar hasta que el aborto sea despenalizado totalmente, y hasta que contemos con un sistema de salud público y de calidad”.  Hoy esto se muestra profundamente correcto y vigente, desmovilizarnos, pensar que es suficiente con el triunfo obtenido, permitirá a los anti derechos avanzar y pondrá en peligro nuestra conquista. Si retrocedemos en la lucha y nos adaptamos confiando en las instituciones y leyes burguesas podría suceder como en Estados Unidos, si mantenemos la lucha exigiendo la despenalización total y la implementación efectiva, presionaremos a favor de nuestros derechos.

Hoy que estamos ante la posesión de Petro y Francia, decimos a quienes han manifestado su compromiso con la implementación de la C055, no es hora de abandonar las calles ni la organización; es hora de reforzar la lucha y exigir al nuevo Gobierno que garantice nuestros derechos tanto velando por el aborto legal, como por el derecho a la salud para todas las personas.

Comisión de la Mujer- PST

 

Comentarios cerrados