Por un ENEES de organización y lucha: ¡Vamos al Paro Nacional Universitario!

El Encuentro Nacional de Estudiantes de la Educación Superior (ENEES) se convoca en medio de una profunda crisis de la educación superior en Colombia, por lo tanto es una oportunidad para que se discutan a fondo las causas de los problemas que aquejan a las Universidades y que evidencian aquella crisis. A partir de ahí elaborar un plan democrático de lucha y organización que responda a las necesidades de la Comunidad Universitaria para enfrentarla.

Autor: Unidad Estudiantil – UNES, Bogotá, marzo 2018

La crisis en la que se ha sumergido la educación superior obedece a una política de desmantelamiento progresivo de la educación como derecho, consignada en la propia Ley 30 de 1992 y profundizada mediante los planes ejecutados por los gobiernos del último periodo y el Ministerio de Educación, siguiendo las orientaciones de los organismos multilaterales internacionales del imperialismo como la OCDE y el Banco Mundial; las imposiciones de las multinacionales y grandes empresarios nacionales. Ser pilo paga, los créditos del ICETEX junto con todo el sistema becario y la Reforma Tributaria, entre otros, son expresiones de la aplicación de aquellos planes.

En medio de la actual coyuntura electoral, el ENEES debe reconocer que las propuestas de los candidatos presidenciales no presentan una posición frente a la lucha contra aquellos planes. Hasta el momento, ningún candidato se ha manifestado explícitamente ir a fondo en la configuración de un nuevo sistema de educación pública, lo que pone en primera posibilidad, una votación masiva en blanco como forma de protesta contra esos candidatos y sus planes.

Retomar la movilización como método de lucha

Como lo demostró el movimiento estudiantil del año 2011, la movilización es el método más efectivo para enfrentar los planes que ponen en jaque la continuidad de la educación pública como un derecho fundamental para los hijos de los trabajadores y sectores populares colombianos. En ese año, por medio de un gran Paro Nacional Universitario y masivas movilizaciones, se logró hacer retroceder al gobierno de Santos en la implementación de la reforma a la Ley 30 que pretendía implícitamente profundizar la privatización de la educación pública superior. Volvamos a las calles como en el 2011.

La reciente elección de un Congreso de la república, profundamente corrupto y reaccionario, que seguramente seguirá agrediendo a la educación superior pública mediante la legislación a favor de los planes anteriormente descritos, hace también imperativo preparar desde ya la movilización en las calles para enfrentarlo. El ENEES debe votar un plan democrático desde la base de movilización nacional en las calles, que incluye una manifestación contra la visita de Donald Trump –defensor de los planes privatizadores de la educación pública– a Colombia en abril, pero con la perspectiva de confluir en un gran Paro Nacional Universitario en conjunto con los demás estamentos.

Avanzar en la organización gremial de los estudiantes

Igualmente durante el 2011, la MANE desperdició la oportunidad de configurarse como una organización gremial de los estudiantes, independiente y democrática a modo de sindicato estudiantil, que pudiera dar continuidad a la lucha contra los planes del gobierno y por una educación pública, gratuita y de calidad. El ENEES debe proponerse como una primera semilla de aquella organización estudiantil que se hace tan necesaria en medio de esta crisis.

También el ENEES debe propender por la conformación de Consejos Estudiantiles de base en cada uno de los programas de todas las universidades a nivel nacional, que le den sustento democrático a aquella organización gremial de los estudiantes. El fundamento de la organización estudiantil debe ser la movilización y la lucha por la educación totalmente garantizada por el Estado, como un derecho fundamental para los hijos de trabajadores y sectores populares, por encima de los intereses particulares de los movimientos políticos y sus agendas electorales.

Luchemos con un Programa de los estudiantes

El sustento político de la movilización y organización democrática de los estudiantes deberá ser un programa votado y discutido por el ENEES que responda a la actual crisis de la educación superior y reconozca las garantías de permanencia para los estudiantes en el sistema educativo, mediante la exigencia de siguientes puntos:

1. Derogatoria de la Ley 30 de 1992 e implementación de un Sistema de Educación Superior, que garantice la cobertura de la totalidad de la demanda, con acceso libre y directo desde el bachillerato, financiado en su totalidad por el Estado.

2. Ruptura inmediata con los planes trazados con la OCDE, el Banco Mundial, el FMI, las multinacionales y los grandes empresarios colombianos, consignados en el Acuerdo 2034.

3. Pago inmediato por parte del Estado de la deuda presupuestal que tienen en déficit a las Universidades y que asciende a 16 billones de pesos.

4. Desmonte del programa Ser Pilo Paga, respetando las garantías de los actuales beneficiarios.

5. Eliminación del sistema becario que enriquece a los negociantes de la educación y exprime a los estudiantes.

6. Condonación de los créditos educativos del ICETEX y todas las entidades financieras a todos los estudiantes afectados por la deuda.

7. Establecimiento de un tope máximo para las matrículas en universidades privadas y matricula cero para las públicas.

8. Pleno acceso a programas de Bienestar estudiantil, que garanticen la estabilidad de los estudiantes en su formación profesional, totalmente financiado por el Estado.

9. Plena autonomía universitaria para desarrollar la academia en función de las necesidades de los hijos de los trabajadores y los sectores populares, y no para los negocios de las multinacionales y empresarios colobmiano. Total democracia interna para la elección de directivos.

10. Garantías democráticas para la protesta social. No a la persecución y el asesinato a líderes sociales y populares.

11. Respeto a los Campus universitarios: no a la intervención del ESMAD, la policía, el ejército en las instituciones educativas.

Comentarios cerrados